A menudo escuchamos cosas como que hay que ir al fisio para una lesión, hay que tener una rutina de ejercicios… Efectivamente eso es muy importante, pero muchas veces nos olvidamos de algo básico: dormir bien.
Dormir lo suficiente es esencial para maximizar tu salud física, rendimiento deportivo y prevenir lesiones. Cuando duermes, tu cuerpo entra en un estado de reparación. Durante estas horas, se regeneran tejidos y se fortalecen los músculos, lo que contribuye significativamente a tu recuperación después del ejercicio.
La falta de sueño no solo afecta tu energía y concentración, sino que también puede aumentar el riesgo de lesiones. Un descanso insuficiente puede disminuir la capacidad de tu cuerpo para recuperarse de las demandas del entrenamiento, lo que puede llevar a un mayor estrés en músculos y articulaciones, aumentando la probabilidad de sufrir lesiones.
Para optimizar tu salud física y rendimiento deportivo, establece una rutina de sueño constante, procurando dormir entre 7 y 9 horas diarias (o las que a ti te hagan falta). Crea un ambiente propicio para el descanso en tu dormitorio, mantén la habitación oscura, tranquila y a una temperatura agradable. Evita el uso de dispositivos electrónicos antes de dormir, ya que la luz azul puede interferir con la calidad del sueño.
Priorizar un buen descanso no solo mejorará tu capacidad de recuperación, sino que también fortalecerá tu sistema inmunológico, reducirá la inflamación y ayudará a mantener un equilibrio hormonal óptimo.